DE LOS PROFETAS Y LOS FILÓSOFOS

Aurora, aprovechando que por SMS me has comunicado que deseas pasarte por El Puerto para tomarte unos días de descanso del ajetreo de tu trabajo en el Hospital Gómez Ulla de Madrid, te escribo este mail para decirte que cuando pidas el permiso, no te olvides de añadir un día antes porque ese día se reúnen los profetas en una cervecería que conozco. Ya sabes, en lugar de llegar el viernes, procura que sea el jueves. María Jesús.

-Pues El Puerto no está muy cambiado.
-¿Cambiado El Puerto? No me hables, no me hables, vamos para atrás como los cangrejos.
-Oye María Jesús, he tomado un día más por aquello que me dijiste de los profetas y los filósofos, no te tomes a mal pero me huele a cachondeo.
-¿A cachondeo? Espera y verás, voy a por un par de cañitas que las sirven en salmuera muy ricas.
-Algo es algo.
En la cervecería comienzan a entrar clientes que se van sentando y colocándose todos mirando al techo donde estaba pintado una esfera alminar.
-¡Están mirando al techo María Jesús!
-Pues claro son profetas.
-Tú no cambias, siempre con tus bromas pero no me engañas, yo vengo a verte no a ver capulladas.
-Espera, no seas impaciente.
-¿Y cuándo empiezan las profecías?
-En el momento que tú quieras.
-¿Qué significa eso?
-Pregunta sobre lo que te interese y ya lo verás.
-Me da corte, yo preguntaría sobre la nada.
-Espera que voy a preguntar yo. Disculpen es que mi amiga es nueva y no se atreve a preguntar, pero le preocupa la nada.
Uno de los profetas deja de mirar al techo, se levanta y se acerca a la barra, pide una caña y la va saboreando para decir: -Lo que se acaba se acaba y si se ha acabado ya estamos cerca de la nada. Un tremendo aplauso se oye en todo el local para seguir diciendo. -No nos preocupemos por la nada ya que nada somos y nada seremos. Pero en ese momento se levanta un joven filósofo y espeta al otro: -La nada es un concepto vacío y por lo tanto compararlo con algo es un oxymoron, esto harto de este desfile profético que se parece más a un decadente torneo de vates por la flor natural de una alejada ciudad de provincias.
-¡Coño que son profetas y filósofos de verdad!
-¡Por eso te he traído aquí Aurora, están causando furor, se están trasladando al Puerto profetas de todo el mundo! Mira, allí al fondo está el afamado Börj Larson de Finlandia que habla pero no lo entiende nadie porque carecemos de traductor. Menos mal que a uno se le ocurrió que hablase a su teléfono móvil y éste nos lo traduce, no muy bien, pero lo suficiente.
Se levanta una profeta, eleva su cerveza y dice: cuando llega la nada huye la abundancia. A lo que responde otra: detrás de un pensamiento está el vacío y por cierto, mi jarra lo está, no lo consintamos. Respondiendo la camarera: en esta cervecería se acabarán los pensamientos y puede que nos veamos inmersos en la nada, pero mucho me preocupo para que las jarras estén convenientemente llenas, ya que de no estarlo se llenarían de hastío, nostalgia y tristeza. Pero faltó tiempo para que una anciana filósofo respondiese: -LLevo años buscando a una mujer y sólo encuentro profetas borrachas.
-Estoy anonadada María Jesús esto es algo inesperado. ¿Han estudiado o son autodidactas?
-Todos y todas están muy bien formados, la mayoría en la Universidad Juan Carlos I de Madrid.
-¿La Juan Carlos I, la de Casado y Cifuentes?
-Esa misma.
-Ahora lo comprendo todo.

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