miércoles, 26 de enero de 2022

SALUD MENTAL PARA POBRES


La consulta daba a Levante y si uno se colocaba algo esquinado en la izquierda del gran ventanal, convenientemente protegido por un enrejado, se advertía a la izquierda un campo de girasoles, al fondo una pinaleta que cada vez sufría mayor presión de las edificaciones irregulares y, además, si se miraba al sur, la belleza serena de los fangos de la marea baja en Puerto Real con el telón de fondo, su oleaje casi imperceptible, los verdes de los limos y el jugueteo de la espuma de la olas, para ya bastante más lejos el silueteo de Arsenal de La Carraca. El doctor Tugrañes miraba a sus pacientes con un cierto desdén, como si se tratasen de ratoncitos que se sacaban de sus jaulas y se les permitía corretear por encima de la mesa de disección sin poderse escapar. Cuando el celador abrió la puerta y franqueó el paso al 321 que venía aguantándose el pantalón del pijama porque aquella mañana le habían dejado una talla XXL, se quedó plantado en mitad de aquella consulta temiéndose cualquier maldad, algo que había aprendido en las tres semanas que llevaba ingresado en la Unidad de Agudos de Salud Mental del Hospital Universitario gaditano. -Siéntate -, dijo el celador y pórtate bien porque andaré por aquí y no te perdono ni una. El médico se volvió, lo miró sin decir nada, se acercó a su sillón, encendió un Ducados rubio, le dio una fuerte bocanada para después dirigirse al paciente. -¿Decía usted en la última sesión que Voz no era el nombre del partido? -No es que lo diga sino que lo afirmo. -¿Puede probarlo? -¡Por supuesto! -¿Cómo? Y el médico puso mucho interés por escuchar lo que le respondía. -Mire, el partido se creó en una montería de rebecos y los participantes se habían cabreado con Rajoy del que decían pertenecía a la derechita cobarde. Se lo digo porque estaba presente como fotógrafo en la misma. -Ese calificativo se lo hemos oido al expresidente Ánsar. -Es suyo. -Bueno ¿y cómo es eso que el partido no se llamaba Voz? -Mire usted para el partido se habían barajado los nombres: Voz de quienes ordenan, luego cambió a Voz de la autoridad, otros decían Voz de la Verdad y algunos preferían Voz del Orden y Dios, pero en el que coincidían casi todos era Voz de los Caciques, ese les encantaba. -¡Qué barbaridad! -Eso mismo dijo el equipo de comunicación, el cual también acudió a la montería, que sintiéndolo mucho no podían promocionar una organización con tal nombre puesto que el marketing no funcionaría, sería tirar el dinero, explicando que los partidos cuyo nombre es muy largo son tradicionalmente de izquierda, rojos, bolivarianos y revolucionarios como Partido Comunista de España; Partido Revolucionario y del Trabajo; Partido Troskista; Partido de Izquierda Revolucionaria entre otros. Los presentes enfadados, porque ellos querían surgir como Voz de lo Caciques ya que se sentían identificado con la denominación, tuvieron que aceptar a regañadientes la sugerencia de llamarlo Voz, pero en latín. -¡Muy interesante lo que dice aunque algo estrafalario! -Así se escribe la historia aunque ahora lo negarán. -De acuerdo, por hoy el tiempo de consulta ha terminado, dentro de un rato, el enfermero le entregará unos comprimidos de clonazepam, se tomará 3 con la merienda y otros tres más con la cena, mañana no tendremos sesión ni el domingo tampoco, por lo que nos veremos en este mismo despacho el lunes ¿vale? -¿Cuándo me dará el alta? -En cuanto la pauta de medicación consiga estabilizarlo podrá salir un par de fines de semana al mes. -Vale -, el paciente se levanta, despide, cierra la puerta lentamente y muy cabreado, cuando se ha alejado convenientemente de la consulta le pega un puñetazo a la pared. - ¡Esto me pasa por decir la verdad, la próxima vez le hablaré de los muchos milagros que realiza la Virgen del Rocío que es lo que quiere escuchar! ¡Coño con los del Opus Dei, otro fin de semana en el manicomio! oooo00ooooo

domingo, 2 de enero de 2022

DESCONFIAD


Desconfiad de ellos porque pueden ser agentes bolivarianos de Maduro para poner en peligro la monarquía y los valores eternos del viva la Legión. Hacedme caso, vienen vestidos de rojo, son gorditos y escalan los balcones temerariamente, mucho me temo sean sannicolases travestidos de la peor ralea.

TODO NO PUEDE SER EN LA VIDA


Había nacido respondona. Aquella niña sólo quería comer de la mama derecha de su madre y a su padre esta situación no le parecía la adecuada, pero mami se lo consentía. Cuando se despertaba de noche y berreaba, porque lo hacía a dos pulmones, en la casa no se sabía qué hacer para callarla hasta que la portera, que era de Covandonga, les dijo el único remedio. Sus padres sorprendidos preguntaron.
-¿Y usted cómo lo sabe?
-Porque soy de Covandonga.
-¿Y eso qué tiene que ver?
-Mucho, les traigo un casete para que le pongan el himno de la Legión.
-Perso señora ¿cómo le voy a poner a mi niña de dos meses el himno ése que habla de muerte?
-Ustedes sabrán.
La madre, harta de los llantos de la niña y aprovechando que el padre que era conductor de los camiones que recogen los contenedores de basura nunca estaba en casa, se la puso y se calmó inmediatamente.
En la escuela no se sentaba hasta que con el brazo derecho en alto no se cantaba El toro enamorado de la luna y Viva España de Manolo Escobar. Cuando se le preguntaba qué quería ser de mayor contestaba que duquesa. Lo que provocaba las risas en la casa que era muy humilde.
Y así fue creciendo en su barrio obrero donde impostaba la voz y era la que mandaba porque a mandar no la paraba nadie.
Tuvo suerte debido a que de chamba asistió a una charla sobre el honor y las tradiciones, de la cual salió nombrada presidenta de los supremacistas de su barrio que por cierto eran sólo dos, la dueña del kiosko de prensa y ella.
En las clases de ciencia sostenía que la tierra era plana, a más b nunca puede ser ser c debido a que las letras son letras y los números números son y aunque la suspendieron varias veces, el director del centro que a escondidas también era terraplanista, corrigió las actas y aprobó el bachillerato.
Actualmente es la portavoz en el barrio de Aluche de los terrasupremacistas con honor, ayudó también a izar la bandera más grande de Madrid. Una tal Monesterio supo de ella y la fichó como asesora, le fue bien, puesto que todo indica que la nombrarán senadora próximamente.
-¿Quién nos iba a decir Maripili que nuestra niña, con los disgustos y mala estudiante llegaría a ser senadora? -Dijo papi.
-Sí, pero la puñetera niña no se pone la vacuna del Covid y tú trabajando en la basura. A mal traer me tiene.
-Bueno, no te preocupes, todo no se no se puede tener en la vida.
oooo0oooo


TÚ VALES MUCHO

-Mami de mayor quiero ser consejero de Iberdrola. 
-Siempre pensé que tú vales mucho.

LA IDEA



Tomó el teléfono corporativo y marcó 001, el de la gran jefa del Registro de Patentes de Cádiz, situada en la calle Antonio López número 17 esquina con Doctor Zurita. Lo había hecho porque intuía que aquel tipo les iba a dar problemas, nunca anteriormente a pesar de ser funcionario casi 20 años, había visto una contumacia como la del que esperaba, el mismo que estaba mirando a través de las letras troqueladas del cristal esmerilado que los separaba, allí estaba, sentado en su asiento central del set de 3 y en el que Manolo Salguero, el del mantenimiento, había colocado dos pegatinas de no usar para evitar los contagios del Covid-19. Allí estaba con su caja de cartón de 12 botellas de Fino Pavón Puerto Fino llena de papeles, fotos, dibujos, mapas, cintas de vídeo Beta y VHS y algunas películas de Súper 8 mm. No sabía qué hacer con él, por eso había decidido llamar a la jefa y que ella hiciera lo que tuviera que hacerse.
La llamada no la cogió nadie aunque eso no le preocupó y volvió a insistir hasta diecisiete veces. Sobre hora y media despúes, el secretario de la Subdelegada del Registro le llamó enfadado.
-Pérez ¿cómo te atreves llamar a 001 cuando en este servicio se sabe que eso sólo lo puedo hacer yo para pasarle alguna comunicación de Sevilla o Madrid?
-Es urgente Manolo, por eso lo he hecho.
-En Patentes nada es urgente, aquí nos dedicamos a documentar marcas e ideas, asuntos que se desarrollará en el futuro, si no estuviésemos trabajando no pasaría nada. Yo mismo estoy ahora en el apartamento que tienen mis padres en una playa de Zahora.
-Manolo tienes suerte, pero yo estoy aquí en el Registro más solo que la una y tengo a uno fuera que quiere patentar una idea.
-¡Una idea!
-Lo que oyes.
-Qué barbaridad -, dijo Manolo.
-Y dice que no se va.
-¿Le has hablado del Covid-19, del cierre de las instituciones para que no se propague la pandemia?
-Mira Manolo ya no sé qué decirle a este tío, ahí lo tengo que lo mismo se levanta que se sienta, pasea junto al barandal del patio, se asoma, mira hacía arriba, saca una calculadora, anota cosas y no se va. Ha llegado a las 8 en punto y pasa de la una, ha amenazado con encerrarse aquí si no lo atendemos y registramos su idea.
-Es grave, ese asunto no le conviene a la jefa porque ahora en el partido la tienen en el punto de mira por sus pasados escarceos con el presidente de la Junta. Tienes razón, es urgente, así que te la voy a pasar. Manolo transfiere la llamada a Mariluz Gómez de Lasaleta y Cairón del Viento de Levante. Suena varias veces. Mariluz acaba de salir de la peluquería y advierte que su teléfono corporativo suena. Se preocupa, se pone en guardia porque no la habían llamado desde hacía al menos cinco meses, busca en el bolso Gucci y entre otras cosas descubre su billetera, monedero, las llaves del coche, lápiz de labios, sombra de ojos, inyectable de ácido hialurónico, una agenda donde nunca anotó nada, una pluma Waterman con plumín de oro que tampoco ha estrenado, compresas, mascarillas de todos los colores para que combinen con su atuendo, tres condones, un paquete de kleenex, un cepillo para el pelo, tres caramelos de menta, dos fundas de gafas, encendedor Loewe y cigarrillos More, revuelto entre todo ello estaba el teléfono corporativo que no paraba de importunarla. Mira el número y reconoce que se trata de su secretario.
-Se va a enterar este, llamarme a mi, a mi con lo ocupada que estoy. Esto me pasa por buena, por aceptar que teletrabajara y así me paga llamándome, buscándome, importunándome. Lo coge.
-Manolo, mira que te lo tengo dicho, no me llames hasta que se produzca otro terremoto como el de Lisboa seguido de maremoto y que las olas lleguen a Villaluenga del Rosario.
-Lo siento mucho señora Gómez de Lasaleta pero estamos inmersos en una gran crisis.
-¡Tonterías! Qué mierda está pasando para que la jefa tenga que intervenir personalmente para resolver los asuntos ¿qué clase de funcionarios tengo?
-Ha aparecido un hombre en Cádiz y quiere registrar una idea.
-¿Cómo? ¿Estás borracho? Te lo tengo dicho, no bebas y mucho menos en el trabajo. ¿Quieren registrar una idea en Cádiz?
-Mucho me temo que sí, el funcionario está desesperado, lleva en el edificio para cinco horas.
-Que llame a la Policía Nacional y lo desalojen inmediatamente, sin contemplaciones. Lo que me faltaba que vengan gente a registrar ideas en mi Registro, Cádiz lo que tiene que hacer es escribir coplillas de Carnaval o escribir recetas de nuevas tapas. No acepto ideas en Cádiz, si cundiese el ejemplo incluso nos veríamos obligados a trabajar y desde que mi cuerpo hace sombra no he currelado en mi vida ni nunca lo permitiré.
-LLama a la policía.
-Trae el reglamento, las normas subsidiarias, las comunicaciones internas, todas las circulares informativas, no se va y dice que no lo hará hasta que registremos su idea.
-Hijoputa que me va a tirar a la ruina ese mierda, ¿se han enterado en Sevilla?
-No señora Gómez, pero si no quiere que esto no trascienda vamos a tener que hacer una excepción.
-No me lo puedo creer, que me pase esto, pregunta cómo se llama ese gilipollas. Mientras tanto ella enciende un cigarrillo extralargo que fuma de forma apresurada.
Al otro lado del teléfono se pone Prudencio el funcionario que está Cádiz.
-Lamento haberla importunado, pero nos ha sorprendido, fíjese si nos hemos negado a registrar ideas que la clave de mi ordenador la tenía apuntada en mi teléfono antiguo que hace ocho meses se estropeó al tirarlo mi hijo a la bañera, aquí le juro que no se ha registrado ninguna idea en casi veinte años que llevo.
-¿Y qué idea es, si puede saberse? -, contesta la jefa.
-El taxidron.
-¿Que quiere registrar la idea del taxidron? Coge un extintor y mátalo con él. No lo dejes salir, es muy peligroso.
-Dice que es una modificación sustancial y provechosa de lo que en muy poco tiempo serán las ciudades y que la idea le vino de la peli Regreso al futuro con el coche Delorian volador.
-Lo que no me pase, lo que no me pase, en mala hora acepté que el partido me mandase a Cádiz. La culpa de Juanma, es su culpa, me odia y quiere mantenerme alejada. ¡Qué cruz!
Mientras tanto el tipo, un tal Serrano, había escrito en una hoja de bloc de cuadrículas con un rotulador bien gordo Edding 800 color negro TAXIDRON y se lo mostraba al funcionario a través del cristal esmerilado mientra sus carcajadas atronaban el edificio, y entre dientes susurraba os haré currar so mamones, pagaréis con sudor la mierda de vida que me he tirado en un escritorio y el culo carpeta que se me ha quedado.
-Jajajajaj jajajaja no podréis conmigo, os haré trabajar, no hay peor guerrilla que la se genera desde dentro de la administración.
ooooo0oooooo