Cuando camino por las calles y plazas me sorprendo con tanta bandera en los balcones, algunas atadas horizontalmente, otras sobre pequeñas astas ondeando al viento y a la polución que sufrimos, pero me inunda el pecho viejas gestas de Pelayos y los Reyes Católicos, compruebo que la gente es patriota y entonces canturreo versos del himno de Infantería:
*“...Ardor Guerrero vibre en nuestras voces.*
*Y de amor patrio henchido el corazón.*
*Entonemos el Himno Sacrosanto.*
*Del deber, de la Patria y del Honor.*
*¡Honor!..."*
*Y claro no tengo otra cosa que hacer que levantarme con mucho disimulo la mascarilla Covid-19 porque me emociono y las lágrimas muestran mi debilidad patriótica.*
*Espero que algún día cuando mire hacia los balcones todos ellos estén cubiertos de banderas y las azoteas también, nuestras prendas todas la lleven como ya la firma Spagnolo hace premonitoriamente, aunque espero que tal día esa España que tanto fervor nos causa sea madre y no madrastra como supuestamente es su deber.*
*oooo00oooo*
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