viernes, 27 de marzo de 2015

LA VISTA ORAL

-Tiene la palabra la acusación. -Señoría, con la venia. Asiente el Magistrado con los ojos y casi imperceptiblemente se intuye que pronuncia prosiga.
-Señoría, esta mujer es mala de solemnidad y ahora intentaremos demostrarlo señoría. Esta mujer hizo algo horrible, inconcebible, inenarrable pero demostrable.
¿Demostrable? -interrumpió el juez.
-Sí señoría, palmariamente.
-Muy interesante.
-El día de autos, la actora llegó a casa pasadas las 3 de la tarde, salió de su trabajo en el INEM, se dirigió a la Avenida de Fuentebravía, entró en un local y salió del mismo con una bolsa de papel. Ese día hacía mucha calor, era 29 de julio pasado, llegó a su portal, sacó las llaves, abrió la puerta, llamó al ascensor, subió en él, llegó al piso 5º y entró en él. Su marido, presente, pues lleva años desempleado de Delphi le tenía preparada la mesa, que consistía, además de platos, vasos, cubiertos, agua y vino, una jarra de gazpacho bien frío, dos caballas asadas y una fuente de papas aliñás. ¿Y qué cree su señoría que hizo esta mujer? Pues abrió la bolsa y lo rechazó todo para comerse una hamburguesa y una cola con hielo. Pido para ella la pena máxima.
¿Cómo demuestra el ministerio fiscal el crimen?
-Señoría, el marido tenía grabando su vídeo para luego regalarle un ramo de flores.
El juez, anonadado ante tamaño crimen, tomó con firmeza su mazo y dio un sonoro golpe para inmediatamente decir: visto para sentencia. Pueden retirarse las partes. -II- ¡Protesto enérgicamente señoría -dijo la abogada defensora. Una chica pecosa natural de Lanzarote pero afincada en Puerto Real desde que su novio encontró allí trabajo eventual de bombero.
El magistrado, que ya había dado el primer paso para bajarse del estrado, se volvió para mirarla. ¿Desacato?
-El gato se ha quedado en casa señoría, es que protesto, me parece injusto que mi cliente no pueda defenderse, tenga en cuenta que colabora un sábado sí y otro no en Cáritas.
-¿Es eso cierto?
.La defensa puede demostrar que es así.
-Se reanuda la vista oral.Tiene la palabra la defensa.
-Gracias señoría. Desde que juré en la Universidad de la Laguna me dije, jamás abandonaré a mis clientes y muchísimo menos si su suegro tiene buenos ahorros, y me mantengo firme en mis convicciones.
-Protesto, dijo el fiscal. Abandonar una mesa con caballas asadas, gazpacho y papas aliñás es delito de lesa humanidad descrito ya en las tablillas del rey Argantonio de Tartesos, se conservan fragmentos de tales tablillas en el tesoro del Carambolo de Sevilla.
-Qué documentado está usted hoy señor fiscal, si sigue así lo mandaremos a Saber y Ganar para que nos consiga recursos y toner para la fotocopiadora de nuestro juzgado. Siéntese por favor, escuchemos a la defensa de la actora.
-Efectivamente, el día de autos, mi cliente salió del INEM y en lugar de dirigirse hacia su casa, tras subirse a su vehículo se dirigió a Burger King y allí compró una hamburguesa doble con queso y cebolla asada, también una bebida de cola con hielo picado, pero por qué hizo eso mi defendida, ¿era eso lo que habitualmente hacía o había ocurrido algo que la tenía muy preocupada? La respuesta señoría es lo segundo. su marido la llamó sobre las 12 de la mañana, interrumpiéndola mientras se afanaba en resolver un sudoku de los difíciles.
-¿De los difíciles? -dijo el juez.
-Sí señoría, de los muy difíciles... Continuará... LA VISTA ORAL -III- …Y es por eso señoría, entre otras cosas, que ya anticipo para mi defendida su libre absolución con todos los pronunciamientos favorables y para el actor, en este caso su marido, sea condenado a trabajos sociales y me reitero en lo de sociales puesto que visto lo visto, tras 7 años parado dudo que encuentre otra cosa.
¿Tiene algo que añadir el ministerio fiscal? -dijo el juez volviéndose para éste.
-Con la venia señoría, claro que sí tengo que decir, por supuesto que sí. No se irá de rositas la actora simplemente por haber sido interrumpida durante su trabajo mientras completaba un sudoku...
-¡Un sudoku de los difíciles señor fiscal, no lo olvide!
-Ni aún así, abandonó una mesa perfectamente pertrechada a finales de julio, poco después de la 3 de la tarde, la ventana abierta, el ventilador encendido, rechazando una jarra de gazpacho bien fresquito, un par de buenas caballas asadas y las papas aliñás. Por no hablar que su marido en todo momento había mantenido la cocina bien cerrada y el extractor puesto para que el olor no traspasase hasta el comedor. No señoría, este ministerio no puede retractarse de su petición de condena flagrante por delito de lesa humanidad, me remito a la tablilla 5.956 del Código Penal del rey Argantonio, a los comentarios legales del gran filósofo Séneca y, no menos importante, la encendida defensa de las papas aliñás que Pepe de Espronceda escribiera en Don Juan Tenorio que cito a continuación: GRAN ODA A LAS PAPAS ALIÑÁS ¿No es verdad, ángel de amor, que en esta apartada orilla más pura la papa brilla y si está aliñá mejor? Este plato que se ufana de sus sencillos sabores, de las campesinas flores como si fuese tu hermana; el pimiento y el tomate que preparas con fruición a golpe de cucharón no comete disparate, ¿no es cierto, paloma mía, que están respirando amor? Por supuesto, antes que llegaran los reaccionarios y modificaran el texto. El ministerio fiscal, espera el alegato de la defensa... Continuará... LA VISTA ORAL -IV- EL ALEGATO DE LA DEFENSA - El Ministerio Fiscal ha hecho una acusación brillante, que aplaudimos desde la defensa pero que no compartimos -dijo la abogada de Lanzarote, notándose que se le habían roto los corchetes del sujetador. Menos mal que llevo la toga que es negra y todo la tapa. -Decía señoría que es fácil traer aquí al rey Argantonio, al no menos docto Séneca y nada menos que a Pepe de Espronceda, pero mi pregunta es ¿qué habría hecho Espronceda si mientras componía esa oda hubiese llegado su mujer para interrumpirle? ¿se hubieran quedado huérfanas las bambalinas del Tenorio? Pues eso mismo es lo que le ocurrió a mi defendida, ella estaba absorta con su sudoku, de los difíciles, como aportamos en la documental, lo tenía casi resuelto, llevaba en ello desde las 10 menos cuarto en que un parado incauto le preguntó si había trabajo para él y, sin embargo, ella que es una funcionario ejemplar del Ministerio de Empleo le sonrió diciéndole: -Cuán largo me lo fiáis amigo Sancho, que dijera don Miguel de Cervantes en El Quijote, que se utiliza cuando alguien vaticina por medio de una pregunta, que una cosa va a suceder en un tiempo que tú piensas que es excesivo, y expresas tu desacuerdo como respuesta. Y abundo más, ¿tiene mi defendida culpa del desempleo nacional, es copartícipe de tantas peticiones en su departamento sin que existan entidades y empresas que demanden trabajadores? ¿Quién la indemniza a ella por su sufrimiento ante tanta pobreza? Esta sala sabe que mi defendida es íntegra y por ello lleva algunos años consultando con su psicóloga que le ha recetado Tranxilium y un no menos importante “no se tome a pecho”. Esa mañana mi defendida había sufrido un shock cuando el parado le preguntó si había trabajo para él y ella, conocedora del sufrimiento humano tuvo que encogerse de hombros. Qué dolor más grande el de mi defendida, qué momento más terrible de soledad e incomprensión. Sí, su marido entendió que rechazarle el gazpacho, las caballas y las papas aliñás era un delito que le infligía su esposa sin razón alguna y tenía razón, pero desconocía la naturaleza de esa situación vital. La respuesta esta clara señoría, mi defendida que por cierto está de baja médica por esta razón y se queda a dormir en casa de su suegro -el mismo que me paga-, se dirigió a Burger King y compró una hamburguesa doble con cebolla asada y cola para suicidarse. ¡Para suicidarse señoría, para suicidarse mi colega del ministerio fiscal! ¿Cómo vamos a condenar a mi defendida? No. Ella es inocente y por serlo, pido su libre absolución con todos los pronunciamientos favorables. La sala quedó en silencio, el juez miró a las partes y lentamente golpeó con su mazo para añadir visto para sentencia. EL JUICIO ORAL y –V- La sentencia. Yo Federico el de los picos, magistrado de este juzgado, habiendo conocido los cargos del Ministerio Fiscal y el alegato de la defensa SENTENCIO: Que la denuncia de Fulano se hizo en virtud a la Ley del rey Argantonio, amparado también por el mismísimo Séneca y Pepe Espronceda, por lo que no se puede rechazar un almuerzo compuesto de jarra fresquita de gazpacho, caballas asadas y fuente apetitosa de papas aliñás, considerado como delito de lesa humanidad desde illo tempore. Que escuchado el alegato de la defensa se sustancia ya que la rea no es culpable del desempleo atávico de Andalucía, y que la temeraria petición del parado reclamando un puesto de trabajo en las Oficinas del S.A.E., desencadenaron un torrente de amargura tal, que predispuso a la denunciada a un suicidio por hamburguesa. Que aunque los cargos se han probado, fallamos que Fulana sea absuelta con todos los pronunciamientos favorables, toda vez que ha quedado marcada por un maiorum sudoku interruptus, provocado por la acusación al llamarla a su trabajo donde su esposa disipaba su pena entreteniendo su mente atormentada. No obstante, ambos cónyuges quedan advertidos que de producirse nuevamente hechos como el juzgado serán condenados al consumo eterno de hamburguesas con cebolla asada, prohibiéndose expresamente ni probar las papas aliñás por saecula saeculorum. Por todo lo cual lo pronuncio, mando y firmo. Federico el de los picos